Este informe detalla el desempeño de la recaudación del Gobierno Federal y la estrategia fiscal del SAT para 2026, reafirmando el enfoque en la fiscalización profunda y el combate a la evasión en áreas estratégicas.
Desempeño Histórico y Acumulado (Enero-Septiembre 2025)
La recaudación federal ha mostrado un crecimiento sostenido, impulsado por una estrategia de fiscalización efectiva:
Crecimiento Acumulado: Los ingresos tributarios al cierre de septiembre de 2025 ascendieron a $4 billones 104 mil 781 millones de pesos , lo que representa una variación nominal de +6.9% respecto al mismo periodo de 2024.
Impuestos Clave:
El ISR (Impuesto sobre la Renta) es el principal motor, con una variación positiva real de +5.9%.
El IVA (Impuesto al Valor Agregado) tuvo un crecimiento real de +6.6%.
El IEPS (Impuesto Especial sobre Producción y Servicios) creció realmente +6.7%.
Se destaca que en 2025, el ingreso observado del Gobierno Federal cumplió con el 100.3% de lo establecido en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF), continuando la tendencia de superávit observada en la mayoría de los años desde 2019
Acciones Prioritarias del SAT para 2026
La estrategia del SAT para el próximo año mantiene un doble enfoque: facilitación y fiscalización profunda:
Combate a la Evasión y Contrabando: Continuará el uso de herramientas tecnológicas para la fiscalización más precisa y efectiva en materia de impuestos internos y de comercio exterior. Se mantendrá la promoción de la equidad a través del litigio estratégico y la coordinación con la Procuraduría Fiscal.
Fortalecimiento Legislativo: Se buscará el apoyo del Poder Legislativo para fortalecer el combate a las factureras, el contrabando y la evasión abusiva, especialmente en sectores como servicios financieros y comercio electrónico.
Facilitación y Confianza: Se buscará una cultura contributiva más responsable, optimizando la atención al contribuyente mediante la simplificación de trámites y la mejora del prellenado de declaraciones (usando información de CFDI).
La autoridad fiscal continuará su política de mano dura contra la evasión, apoyándose en la tecnología y en un marco legal más estricto (como la restricción de sellos y el beneficiario controlador). Para el sector de Comercio Exterior, es vital destacar el énfasis en la fiscalización profunda en materia de impuestos internos y de comercio exterior, lo que implica un riesgo alto de auditorías en operaciones de IVA por importación.
